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martes, 31 de mayo de 2011

LOS RECUERDOS, LA SOLEDAD Y LA FAMILIA; ASÍ COMO PENSAMIENTO TITULADO "LIBERTAD"

Mi familia tiene una casa de campo, que visitamos muy poco, en ocasiones, estoy en ella una semana, solo para llevar a las persona, que me ayudan a realizar la limpieza del campo cerca de ella, desafortunadamente extravié las llaves y dejé, de ir por una larga temporada, finalmente en febrero, las volví a encontrar y pase a la casa, que sorpresa la habían asaltado y saqueado, se llevaron hasta el cable de la luz, así mismo, los tubos de cobre con los que se lleva el agua a los tinacos, entre otras muchas cosas, de los licores se llevaron el ron, el tequila y el brandy, pero dejaron los vinos blancos, tintos y la sidra, desde luego la ropa, eso no les interesó, suponemos que buscaban dinero, porque hasta en los cestos de la basura del baño buscaron, para entrar cortaron en seis puntos barras de acero de 3/4 de pulgada, en otra puerta cortaron el candado y la barra de acero de la chapa. También entraron a la bodega,  una llave que llevaban pudo abrir el candado. El secretario que levanto el acta, señaló que las personas que entraron son peligrosas, los clasificó como zorreros, seguro que por la ventana metieron a un niño, que en el interior de la habitación se hizo del dos.

En fin que muchas veces paso a esa casa cuando voy al rancho donde mi familia tiene sembrado café; cuando estoy ahí, me gusta la soledad, aún cuando tengo implementos para hacerlo, siento especial placer de cortar la hierba y el pasto, con las manos.

Aún cuando lo seguiré haciendo, esta costumbre se va perdiendo, por la inseguridad que acabo de describir, y porque la soledad es buena en el día, pero en la noche como quiera que sea entran miedos, recuerdo que en una ocasión que me quede a dormir en la bodega, porque no quise hacerlo en la casa que utiliza la familia. Que entre paréntesis diré que es mas segura. En la noche, me despertó el viento, estaba en el segundo piso y me asustaron unas sombras que se reflejaban en el piso, no recuerdo si había luna o no, pero con miedo me pare a investigar, la procedencia de las sombras y por increíble que parezca, como a 300 metros, esta una casa que esta a mayor altura que la nuestra y tiene como cerca unos árboles, pegado a la casa tenían encendido un reflector que enviaba las sombras de los árboles hasta donde estaba Yo, dí las gracias a Dios, por no estar enfermo del corazón.

Así consideró de un temple especial a las personas que viven solas, mas aún cuando son grandes como la abuela de mi yerno David que tiene 94 años, ya que no solo tienen temple, también son valientes puesto que tampoco las vence la depresión; no me explico en donde esta su equilibrio, porque aún cuando tengo menos edad, por las tardes muchas veces me entra una nostalgia, que controlo, pero que cada vez se va haciendo mas frecuente.

Desafortunadamente esta costumbre y práctica extraordinaria que te permite encontrarte contigo mismo, poco a poco, se ira perdiendo, porque el país en el que vivimos, cada vez es mas inseguro; el gobierno se preocupa porque la población civil, no se organice, hacen retenes para que no lleve uno armas en los automoviles, pero a los ladrones les permiten que las tengan de alto calibre y de repetición; si por desgracia un ciudadano llega a matar a un ladrón, no te la acabas por las organizaciones de los derechos humanos es seguro que te acaban.

La seguridad que se pierde es un valor que no tiene precio y desafortunadamente ya no se podrá recuperar, primero porque el país ha crecido mucho y los gobiernos al no contar con los elementos que permitan en primer lugar generar capital humano con capacidad empresarial, no se generan empresas y menos aún los tan ansiados empleos, que son el motor de la economía.

A la mitad de esta escritura, incluyo un pensamiento, que he titulado "LIBERTAD"; el cual es como sigue:

LIBERTAD

La v ida me ha rebasado,
A veces alegre,
A veces triste,
A veces dolorosa,
En días nublados y soleados,
Entre viento y agua,
He caminado,
En busca de mi libertad,
De la libertad de mi subconsciente,
En busca de lo que me hace feliz.

Me gusta el campo,
Me doy cuenta !porque!,
Porque el campo es la naturaleza,
Es la libertad,
La naturaleza me acepta como soy,
Me confieso con ella,
No tengo nada que ocultarle.

Cuando estoy solo grito,
Con el grito llamo a mis muertos,
Creo que me escuchan,
Les pido que me protejan,
Todo a través de un grito.

El grito es la expresión de libertad,
El grito te hace humano,
El sentimiento del ser es el grito,
Con el grito expresas:
Dolor; cuando algo es desgarrador,
Querer; cuando el sentimiento
no te cabe en el cuerpo,
Amor; cuando te duele el alma,
Tristeza; cuando los recuerdos te hacen sufrir.

Pero sobre todo a través del grito,
Se expresan los seres libres.

Así se debe vivir, hasta el último instante,
Porque también en el último instante se aprende,
Para llegar a donde se deba llegar,
Con un grito de alegría y libertad.

Ahora continuo con mis recuerdos, abordo así el tema porque desde 1978, por 18 años, casi cada fin de semana, lo pasaba en la sierra y caminaba de 10 a 12 kilómetros, algunas veces hasta 20 kilómetros, de subir y bajar con un calor sofocante.

Cuando eres joven te sientes invulnerable, no tienes miedo, sientes que la muerte esta muy lejana, con esta convicción caminaba por la sierra, muchas veces solo y otras acompañado, por el encargado del rancho.

Varias veces hubo personas que me veían caminar sin nada con que defenderme, que me llegaron a

Como anécdota tengo, que por el año de 1988, mi suegro Raymundo, me empezó a acompañar; el decía que ya había vivido y no le tenía miedo a nada; así en una ocasión que veníamos de regreso al automovil, se desato una tormenta, con muchos rayos y mi suegro se persinaba y pedía a Dios, que nos protegiera, Yo me reía de él, de su miedo, le dije no que usted no le tiene miedo a nada; en cambio, Yo en ese momento, me sentía en mi elemento, con la lluvia en el rostro, en libertad. Sin embargo, confieso que no sentí como paso el tiempo; ahora tengo 59 años y los mismos miedos que mi suegro tenía, seguramente por que siento que poco a poco, la hora se acerca y eso me hace apreciar mas la vida.

Otro anécdota, es que en junio de 1989, fue una de las pocas veces en que lleve al rancho a mi hijo Fernando y a mi ahijado Daniel Torres, en este viaje nos acompañaban mi suegro y mi encargado, nuevamente al regresar al automovil, encontramos a un campesino, con su esposa, que por ser domingo, regresaban a casa, con la raquítica despensa para toda la semana, en la que no podía faltar el combustible que mueve al hombre del campo, una garrafa de 5 litros de aguardiente, antes de que nos cruzáramos en el camino el señor me habló por mi nombre y me invito a tomar un trago de aguardiente, directo de su garrafa, lo cual realice y le pedí permiso para invitar a quienes me acompañaban, ahí probaron por primera vez el aguardiente, mi hijo y mi ahijado, ese fue su bautizo del campo, al estilo de los cosacos; a esa edad no les gusto, 22 años después, mi hijo todavía recuerda que el aguardiente, le quemaba la garganta, no obstante que tuvieron esa experiencia desagradable, ambos toman alcohol, bueno pero lo hacen con moderación.

Todavía recuerdo las caras que hicieron y todos reíamos por las expresiones en las caras de los niños.

Esta experiencia es irrepetible, estoy seguro de que ninguno de mis nietos la podrá tener.

Así viví mi vida desde 1978 hasta finales de 1996, la razón por la que deje esa vida de libertad, es que para entonces, casi siempre viajaba junto con mi hermano menor, en el convivio que se da con la gente, que nos ven como alguien importante, y todos te quieren invitar una cerveza, a la que tu deber es corresponder, visitábamos las cantinas y algunas realmente eran prostíbulos, en una de esas ocasiones, me encontraba dormido en la camioneta y salieron a pedirme que fuera por mi hermano porque se podían poner las cosas feas, ya que estaba discutiendo por defender a un compadre, en el transcurso de la siguiente semana hable con mi madre, que funcionaba como nuestra consejera, a pesar de que mi padre aún vivía, para decirle que hasta entonces acompañaba a mi hermano, porque por su forma de conducirse consideraba que lo podían matar y el como soltero no le hacía falta a nadie y dije: Yo si le hago falta a mi esposa y mis hijos. Finalmente, de forma injusta, no lo recuerdo pero 6 meses o un año, mas tarde, mataron a mi compadre, al estilo de los mafiosos haciéndolo sufrir.

También estaba el reclamo de mi pareja que decía a que vas al rancho si solo sirve para que gastes dinero, de el, no has sacado ningún provecho, en esta casa Yo, soy el hombre y la mujer, desde luego, que así me perdí de lo mejor de la vida de mis hijos, que fue el poder convivir con ellos durante su niñez. En justificación debo señalar que todo lo que se hace es para mejorar y las cosas no resultaron, pero creo que al menos nuestro matrimonio funcionó y por esa misma razón se ha mantenido durante casi 35 años.

En junio de 2010, un hermano mayor, me preguntó si en todo el tiempo que fui al rancho y estaba solo, los fines de semana, no había tenido una experiencia extra marital, con alguien y le dije que no, él me respondió es lo que dices pero tampoco estas obligado a confesarlo.

Oportunidad se tenía, por varias razones, las mujeres te ven como alguien con dinero que les puede dar otra clase de vida, y las de los prostibulos, sin menospreciarlas como seres humanos, nunca me parecieron agradables por su apariencia, su olor a alcohol, el olor a cigarro, que es parecido al de los pies, así mismo el perfume y el maquillaje que usaban me revolvía el estomago; por otra parte, al ser profesor de nivel superior, Yo me sentía tontamente como un sacerdote.

Regresando a la cuestión de la seguridad, ahora las veredas se han convertido en caminos transitables, sin embargo, son inseguros y hay asaltos, no todos los asaltos son con el fin de delinquir para obtener dinero, algunos, se cometen por hambre, y van por la despensa, me contaron la historia de una señora a la que le quitaron su despensa, y dijo ya te conocí, eso basto para que la mataran a machetazos.

El problema no se reduce a que quienes asaltan sean adultos, ya que muchas veces llevan niños, para que les ayuden a entrar en las casas, debemos imaginar la educación que están recibiendo estos niños "Cuando desaparezca el maestro, se quedará la escuelita", algunas veces con la complascencia de la mamá, ayudan al papá, en lo que consideran su trabajo.

A pesar de la oposición de mi pareja, para que siga llendo al rancho, voy unas 10 veces al año, se opone  porque dice que la carretera esta muy mal y un día me voy a matar en las curvas,  todavía le tengo Fe, al campo, ahora mismo con mi socio, estamos emprendiendo un negocio de venta de café, con un local y un carrito, aún cuando mi socio no lo sabe, espero que el 5% de las ventas, sea para ayudar a la gente a realizar proyectos, que los conduzcan a un mejor nivel de vida.

Todavía no se si el proyecto tendrá éxito, por mi forma de ser y tratar de ayudar a la gente he recibido críticas, en una de ellas me decían si les vas a dar terreno a los campesinos  por 10 años mejor regalaselos, otra persona cercana a mí, me dijo " porque le quieres cambiar la vida a esta gente, porque les quieres dar cosas a las que no están acostumbrados, no te das cuenta que ellos, así son felices".

Tengo el sueño de poder hacer una escuela de Artes y Oficios, y para ello en el mejor lugar de rancho, estoy dispuesto a donar una hectárea 10,000 metros cuadrados, Ojalá pueda vivir para verlo y lograrlo.

Esto me recuerda un comentario, que en broma me hacia una persona preparada, no hagas que los campesinos siembren maíz, impulsalos para que siembren mariguana, así podremos pagar la deuda externa y el maíz, se lo compramos a los gringos.

En las condiciones actuales creo que ni siquiera una revolución, podría modificar las condiciones de vida, la falta de trabajo, la inseguridad, hemos visto lo que ha pasado en otros países, incluso en el nuestro, los ganones de la revolución son unos cuantos, se derrama mucha sangre y no se llega a nada.

Finalmente, creo que si no buscamos y encontramos elementos, que permitan que el orden de las cosas cambié, estaremos ante la última frontera de nuestra libertad.

Hasta la próxima

2 comentarios:

  1. el párrafo inconcluso, debió decir:

    Yo, contestaba que no tenía de quien cuidarme ya que solo tenía amigos, lo cual no es tan cierto, porque mi padre si tenía enemigos, y los odios, pasan de padrea a hijos. Además, de que no pensaba en otro tipo de peligros, como son la serpientes a las que les tengo pavor, o los coyotes.

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  2. Yo creo que el miedo es parte de nuestra vida; de hecho pienso que el miedo nos hace estar alertas, listos para cualquier situación. El problema se agrava cuando ese miedo ya no nos deja vivir.

    También, de su pensamiento, reflexiono que se grita de igual forma cuando necesitas fuerza, voluntad, valentía. Yo hacía Kempo y una de las formas de sacar fuerza en nuestros golpes o patadas era mediante el grito.

    Me fascinó el escrito, lo leí todo y eso que es bastante extenso. Deseo de todo corazón que sus sueños se cumplan. Y ya verá que vivirá para verlo. Saludos.

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